En esta entrada traemos materiales que creamos para el aula ordinaria con el objetivo de que se vaya generando un hábito de trabajo autónomo a través de tareas que sean intuitivas y no requieran una supervisión constante.
Evidentemente, cada docente tiene que saber de qué nivel parte su alumnado y qué destrezas motoras tiene.
Primero le facilitamos el cuadrante donde tiene que asociar el color con las cosas que aparecerán abajo. En todo momento estamos trabajando el 1, 2 y 3.
Luego pasamos al tamaño donde volvemos al cuadrante de doble entrada con tres niveles por ordenar. Nos vamos familiarizando con el 1, 2 y 3.
En este último cuadrante ya aparecen las cantidades. A través de los puntos podría ser que intuyera qué imagen va en cada casilla.
Todo este trabajo en plano ha tenido que ser trabajado en volumen en las sesiones individuales o en pequeño grupo, sino, una ficha como esta no tendrá significado ninguno.
En este folio A4 tenéis los rellenos de las tres fichas anteriores.
Un puzzle con tres partes es otro modo de familiarizar al alumnado con este concepto y hemos elegido las palabras que a su vez tenían tres sílabas de modo que al decirlo también sentimos el 1, 2 y 3.
Os mostramos algunos modos de asociar cantidades a la grafía del número y siempre que sea posible al conteo con los dedos.
Esto lo hacemos cuando vamos al "campo" en nuestro momento de la fecha, vaya, cuando vamos a la mesa de estación y recogen frutos del otoño que se llevan en una cesta a la mesa y ahí juegan hasta que los animo a ordenarlos por cantidades. Realmente en la mesa solo hay una nuez, ninguna más y esto da lugar a que haya menos confusión. Tal cual, luego tenemos dos almendras y castañas sí que tenemos más pero ahí entra el colocar solo lo que dicen los puntos de la ficha.
Cada día es distinto en la mesa de estación, aquí podéis ver un vídeo con lo que recogieron un día en la cesta y con otro cuadrante distinto donde se ofrece menos ayuda, como decía al principio, se trata de valorar el nivel de cada alumno.
Os dejamos algunas fotos de la mesa de estación de este otoño.
Y nuestra BAtata ahora es una BAtata-RAta y no la confundáis con una PAtata.
Esta rata está comiendo de lo lindo castañas, nueces, CACA...cacahuetes... Es amiga del gnomo del otoño que vive en el tronco del árbol y juega con las semillas voladoras. Cada año surgen nuevos personajes, son los niños quienes los van creando, ese boniato/batata se prestaba a ser una rata y en eso se ha convertido.
En este momento jugamos a ser árboles, cantamos la canción del otoño y de nuestras ramas que son nuestros brazos caen las hojas, luego las ordenamos por tamaño, las contamos, decimos dónde han caído...
"Por el camino" de Mariana Ruiz Johnson, editorial Kalandraka. Yo lo canto parecido a esta chica pero en cada número remarco desde el uno hasta el que toca, genero mucha más repetición y vamos tocando a los personajes de izquierda a derecha favoreciendo la mirada de la lectoescritura.
Y otro cuento que es maravilloso para trabajar con los dedos lo que vamos cantando con imágenes es "Cinco patitos" de Margarita del Mazo, editorial Jaguar. Es un regalo ver cómo lo cuenta. Una maestra para que aprendamos a darle vida a su cuento y lo hagamos nuestro. Es un éxito con los infantiles. El juego con los dedos es fantástico con este cuento y los inicia en la cuenta atrás.
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